El tomate es la base de la universal salsa Ketchup. A él, se le añade vinagre, azúcar, sal y especias. También se le puede añadir: cebolla, ajo, pimiento verde, pimentón dulce, mostaza en polvo, canela molida, pimienta molida, guindilla (opcional en caso de que queramos que pique).
Para una mayor densidad y fuerza de sabor se utiliza el concentrado de tomate. El kétchup es dulce o ácido dependiendo de la mayor o menor cantidad de azúcar o vinagre (de vino o de manzana).
Está buenísima con patatas fritas, hamburguesas, carne a la plancha, a la parrilla o cocida.
Aunque es la “sal” para los americanos es utilizada en todo el mundo.