Para 10 personas:
- 10 patatas
- 3oo gr. de queso ricotta “Negrini”
- 200 gr. de queso Parmigiano
- 13 yemas de huevo
- 1 chalota
- Trufa en láminas y triturada “Tentezioni”
- ½ l. de leche
- 100gr. de nata “Virgilio”
- 300 gr. de queso Fontina
- 80 gr. de mantequilla “Ferrarini”
- 100 gr. de harina
- 1 copita de coñac
- Nuez moscada, sal, pimienta y perejil
Cortar las patatas por la mitad, darles una forma redondeada y vaciarlas para obtener una especie de cestita. Cocerlas al vapor durante unos 20 minutos. Dejar que se enfríen.
Cocer la chalota y triturarla. Mezclar la ricotta con la chalota, con un poco de trufa triturada y con un poco de Parmigiano rallado.
Calentar una sartén antiadherente pequeña y esparcir en el fondo Parmigiano rallado; cuando se haya fundido, con una espátula, darlo la vuelta, sacarlo de la sartén y moldearlo; así hasta 10. Conservarlos al calor.
La fonduta se hace como si fuera una bechamel a la que se añadirá, al final, la Fontina,la sal, la pimienta y la nuez moscada rallada. Mezclarla con 3 yemas y la nata. Ponerla al fuego otra vez y , removiendo constantemente, dejar que cueza, sin llegar a que hierva y añadir el coñac. Mantenerla caliente.
Rellenar las patatas con el compuesto de ricotta, encima, colocar las yemas, una por patata.
En cada plato echar un poco de la fonduta, en el centro, la patata rellena y decorarlo con la galleta de queso, la trufa laminada y ramitas de perejil.