Para 4 personas:
- 400 gr. de harina para polenta (en Grossi)
- 1,5 l. de agua
- 150 gr. de salchicha italiana fresca “Negrini”
- 100 gr. de panceta
- 50 gr. de panceta ahumada
- 100 gr. de jamón de Parma
- 1 cebolla mediana picada muy fina
- 1 dl. de vino blanco seco
- Aceite de oliva, sal y pimienta.
Preparar la polenta siguiendo las instrucciones de la confección. Verterla en una fuente y dejarla enfriar.
Cortar en daditos las dos clases de panceta, el jamón y las salchichas sin piel. En una sartén, con 1 cucharada de aceite de oliva, dorar todo a fuego medio, dándole vueltas con una cuchara de madera. Cuando se haya dorado, añadir la cebolla, dejar dorar durante 2 minutos más, echar el vino y dejar que se evapore. Unir la polenta (ya hecha) y, con un tenedor, mezclarlo a fuego vivo hasta que se forme una costra. En este momento, darle la vuelta como si se tratara de una tortilla y transferir a un plato grande para sacar a la mesa.
Se sirve muy caliente. Si se quiere, se le puede espolvorear queso Parmigiano (u otro queso al gusto) rallado.
Para acompañar este plato de invierno, aconsejamos un vino tinto Vesubiano.
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