En una sartén antiadherente doramos en 15cl. de aceite de oliva extravirgen 200gr. de guanciale (en caso de no tenerlo, usaremos panceta) cortados en cubitos. En un bol batimos bien 3 huevos frescos con 60gr. de queso Pecorino o Parmigiano rallado y pimienta negra molida (a gusto).
Cocemos ½ Kg. de pasta larga Grossi, escurrimos y la mezclamos, en la cazuela donde se ha cocido que está caliente, con el guanciale y los huevos batidos. Al sacarla a la mesa, en el mismo recipiente, se acompaña con más queso rallado y pimienta.
Esta es una receta típica del Lazio. La leyenda cuenta que era el plato que preferían comer los carboneros que trabajaban en las zonas cercanas a Roma.
